La Municipalidad de Caucete enfrenta una deuda de aproximadamente $700 millones con la Distribuidora Eléctrica de Caucete S.A. (DECSA), correspondiente al servicio de alumbrado público. La situación ha generado un conflicto entre la intendenta Romina Rosas y la empresa proveedora de energía, así como con el Ente Provincial Regulador de la Electricidad (EPRE).
En una conferencia de prensa que buscaba esclarecer la situación financiera del municipio, la intendenta reconoció la existencia de una deuda millonaria con la empresa de energía Decsa, aunque evitó explicar cómo se generó el pasivo acumulado desde el año 2022, a pesar de que el municipio contaba con recursos disponibles durante ese período.
Sin embargo, lo que más sorprendió no fue la falta de detalles técnicos sobre la deuda, sino una frase que rápidamente encendió la polémica: “Que se hagan cargo los cauceteros”, declaró Rosas, en referencia a quién debería asumir el compromiso económico.
Hasta el momento, desde el entorno de Rosas no se emitió un comunicado oficial aclarando o contextualizando sus dichos. En redes sociales, varios usuarios expresaron su indignación, y algunos incluso pidieron explicaciones sobre el destino de los fondos municipales durante los últimos años.
La situación financiera del municipio también está siendo investigada por el Tribunal de Cuentas de San Juan, que ha solicitado documentación sobre gastos en fiestas, sueldos y subsidios que, según el organismo, no tienen respaldo legal ni presupuestario.